En el pasado mes de Agosto, la Liga 2025-26 comenzó con gran expectación y emoción, pero también con polémica y errores arbitrales que han dejado a muchos aficionados con la sensación de que el ruido arbitral no ha sido silenciado. A pesar de que ya han transcurrido las tres primeras jornadas, los escandalosos errores, los “neverazos” y la falta de eficacia del VAR han sido temas recurrentes en las conversaciones futbolísticas.

El parón de selecciones de septiembre se presenta como un momento clave para reflexionar y evaluar lo sucedido en las primeras semanas de competición. El próximo jueves 11, si el CTA (Comité Técnico de Árbitros) y la RFEF (Real Federación Española de Fútbol) no modifican su postura, se espera la implementación de un nuevo organismo arbitral que busque mejorar la calidad y la transparencia en las decisiones que afectan al desarrollo de los partidos.

La historia de la Liga 2025-26 está siendo escrita con capítulos marcados por la controversia y la incertidumbre en torno al desempeño de los árbitros. Los aficionados, los clubes y los propios jugadores han expresado su descontento ante situaciones que han afectado el desarrollo normal de los encuentros y que han generado debates sobre la necesidad de introducir cambios en el sistema arbitral.

El CTA y la RFEF se encuentran en el centro de la atención, con la responsabilidad de tomar decisiones que contribuyan a mejorar la credibilidad y la eficacia del arbitraje en el fútbol español. La creación de un nuevo organismo arbitral representa una oportunidad para renovar las estructuras y los procesos que rigen la labor de los colegiados, con el objetivo de asegurar un mayor nivel de justicia y equidad en la competición.

En definitiva, el panorama arbitral en la Liga 2025-26 ha sido objeto de críticas y cuestionamientos, pero también abre la puerta a la posibilidad de implementar cambios que impulsen la evolución y la profesionalización de esta faceta fundamental del fútbol. El parón de selecciones de septiembre se presenta como un momento decisivo para sentar las bases de un nuevo camino que contribuya a fortalecer la integridad y el buen desarrollo de la competición.